Un barrio marginal llamado "Las mil viviendas". Sucio, enroscándose en su propia desintegración, plagado de espacios saturados de cosas que quizás no volverán a funcionar, de platos sin lavar, de ropa manchada. Ese es el universo donde nos ubica de entrada Clarisa Navas, y nos obliga a recorrerlo en detalle a través del uso de planos secuencia que no solo acompañan a los personajes en sus largos diálogos, sino que imprimen a esos espacios una sensación de inmensidad, de contigüidad, de eternidad. Nadie parece tener chances de escaparse de ese entorno...y tampoco parecen tener la intención de hacerlo. La historia se centra en Iris, una adolescente que está descubriendo su sexualidad, atraída por las mujeres, y un coro de personajes que la acompaña a la vez que transita sus propios problemas. Ella oficia de hilo conductor de la trama, pero los deseos, temores e inquietudes propios y de su entorno son lo que prevalece, lo que toma protagonismo. La interacción con sus hermanos, vecinos y amigos se da en un ambiente cargado de contacto físico, casi de promiscuidad, rozando los límites de ciertos tabúes. Todos y cada uno de los personajes que habitan este mundo tiene su historia, sus preocupaciones, su desarrollo. Y todo está vinculado tanto con lo sexual como con la marginal, con la búsqueda de identidad y con el peso de los prejuicios propios y ajenos, en un pasaje fuertemente condicionado por el "qué dirán". Es un relato atrapante sobre realidades que no vemos, o que tal vez no queremos ver. Lo destacable es que este magnetismo no pasa ni por el morbo ni por la romantización de las situaciones. Al contrario: te atrapa por lo sensible, por la capacidad de no caer en personajes o situaciones estereotípicas, por plantarse desde un costado humano buscando empatizar y no exhibir o exponer al más vulnerado. Dos horas que se pasan volando, con una sensación de peligro constante. Humana, sensible y lejos de caricaturizaciones. Con un uso frecuente de planos secuencia que, sumado a lo laberíntico de los espacios, refuerzan esta sensación de desvarío sin salida. Recomendadísima, estará en breve en la pantalla de Cine.ar.